Llega una etapa en la que nuestros hijos ya pueden comer todo tipo de alimentos, pero es importante tener especial cuidado con los alimentos que les damos.
Los más pequeños deben evitar determinados alimentos que se encuentran crudos. Lo más recomendable siempre es cocerlos para eliminar las bacterias y toda sustancia perjudicial.
Los mismos son los siguientes:
– Los moluscos, especialmente los de concha externa como mejillones, almejas, ostras, etc. Al comerlos se puede correr el riesgo de Anisakus. Éste es un parásito que dificulta la digestión, y bien los adultos sanos pueden evitarlo, los niños pueden enfermar gravemente.
– El pescado crudo, este tiene un elevado riesgo higiénico y debe ser escogido fresco. De igual manera no lo recomendamos para los niños.
– Hay hortalizas como las patatas o las berenjenas que consumidas crudas resultan indigestas.
– Los huevos también deben de consumirse cocidos ya que son transmisores de muchas enfermedades.
– La leche de vaca cruda, ésta tiene muchas bacterias, por lo tanto, ha de hervirse a 70 grados al menos durante 15-20 segundos.
– Las legumbres secas, estas deben ser cocidas porque contienen factores antinutricionales que el organismo no puede digerir y que incluso pueden resultar tóxicos.
– La carne de ave y de cerdo, si bien hay carnes que pueden consumirse crudas, este no es el caso de la carne blanca de ave o la de cerdo.
Es importante seguir todas estas indicaciones ya que de otra forma nuestros hijos puede contraer enfermedades graves.