El verano se acerca rápidamente y muchas de nosotras ya comenzamos a prepararnos para recibirlo con los brazos abiertos. Seguramente una de las cosas que más estamos esperando es quitarnos toda esta ropa abrigada que nos abulta y pasar a prendas más cómodas. Decirle chau a las botas y hola a las sandalias. Aunque, para muchas esto también significa que deben arreglar sus pies urgentemente.
Muchas mujeres sufren de las molestas durezas, que le dan un aspecto feo a nuestros pies, pero nadie es culpable de que las tengamos. Estas se deben a que muchas tienen más facilidad para queratinizar, es decir, para formar durezas. Es genético y está directamente relacionado con el tipo de pie.
Además, es importante recordar que las durezas son una forma del pie de defenderse de agresiones externas, tales como la presión o el roce. Por tanto, es normal que aparezcan si utilizamos calzado que nos aprieta o lastima.
Algo muy importante es que no debemos nunca intentar quitarlas nosotras mismas con un instrumento filoso. Esta tarea debe dejarse para los profesionales, ya que los podólogos saben cómo utilizar esto exactamente y nosotros no. Sin experiencia es muy probable que nos cortemos y aún peor, que la herida se infecte. Las personas diabéticas deben tener especial cuidado con esto, ya que pueden terminar muy graves.
Por último, recuerda que las durezas nunca deben eliminarse al 100%, ya que son una protección natural, si las quitamos todas nuestro pie quedará muy sensible.
Teniendo estos consejos en cuenta podremos recibir al verano con pies muy bellos y cuidados.
¡Mucha suerte!