Con la llegada del verano comenzamos a perder capas de ropa y en ocasiones nos damos cuenta lo poco que cuidamos nuestra piel durante el invierno. En varias ocasiones hemos hablado sobre la importancia preparar nuestra epidermis para recibir a la nueva estación. Debemos tener en cuenta que durante el invierno la piel casi no vio la luz, por tanto, está sensible a la misma y más aún con los efectos nocivos del sol. Una de las consecuencias de no cuidar correctamente a nuestra piel son las manchas en la misma. Por eso, hoy te contamos que medidas debes tomar para evitarlas. ¡Presta mucha atención!
Como comentábamos es importante garantizar la máxima protección a nuestra piel frente a las altas temperaturas y a los agentes externos como el viento, el mar o el cloro de las piscinas. Para esto hay dos elementos que son imprescindibles: la exfoliación y la hidratación profunda.
En cuanto al primer elemento, es importante para eliminar el exceso de células muertas que pueden acumularse en sus capas más externas. Las células de la piel se renuevan cada 28 días sin que nos demos cuenta, aunque, durante el inverno con tanta ropa la falta de oxigenación adecuada puede dificultar este proceso. Por eso, ayúdate de un suave exfoliante corporal que te ayude a preparar la piel para cualquier tratamiento posterior.
Por último, en cuanto al segundo elemento, mantén hidratada tu piel siempre, recuerda elegir una crema que este de acuerdo a tu tipo de piel y que contenga propiedades nutritivas, de esta forma te asegurarás de que la misma se mantenga elástica.
¡Esperamos que estos consejos te sean de gran ayuda!