Esta semana vamos a seguir hablando sobre los llamados «Mandamientos de la belleza», ya analizamos los dos primeros, los cuales involucraban la hidratación de la piel y el uso de los masajes para cuidar de la belleza de nuestra piel. Hoy vamos a tratar dos puntos más, primero los sueros y después la protección solar.
En el caso del primero, los sueros, vamos a recordar su principal función, que es la de aportarle vitaminas a la piel, de modo que esa pueda cumplir su un ciclo completo de renovación celular. Esto es especialmente beneficioso en los cambios de estaciones, cuando la piel pierde sus condiciones optimas debido a esto, también los periodos de fatiga y estrés o por causa de las agresiones del sol, el frío o el viento. Por tanto, los sueros nos permiten mantenerla saludable y cuidada.
Por otro lado, en cuanto a la protección solar, es importante recurrir si es posible a emulsiones, espuma, aceites, cremas, geles, fluidos y toallitas, las cuales ayudan a gestionar la acción de los rayos solares sobre la piel. Además de utilizar el factor solar indicado para protegerla de los rayos ultravioletas que tanto daño ocasionan. De esta forma podemos tomar sol con seguridad y beneficiarnos de la vitamina E, que se obtiene a partir del sol y regula el paso del calcio.
Si tenemos en cuenta estos puntos daremos un gran paso para mantener la salud y belleza de nuestra piel.
¡Suerte!
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