Hasta hace muy poco tiempo el berro era considerado “alimento de ovejas”, sin embargo, la situación en nuestros días ha cambiado. El berro, actualmente, considerado una exquisitez , tiene además muchos beneficios medicinales.
En la antigüedad se utilizaba como medicina para las inflamaciones, dolores producidos por el reuma, las grietas de la piel y otras heridas. Hoy en día, el berro vuelve a utilizarse para muchas de estas cosas.
El berro contiene yodo, hierro, calcio, fosfato y vitaminas A, C y E. Por lo tanto, es bueno para la anemia y para personas que sufren de stress. Además, se lo recomienda para aquellos que tienen problemas del corazón y de los riñones, también para los que padecen trastornos respiratorios y dolencias estomacales (aunque en estos casos no se recomienda consumirlo en exceso).
El jugo del berro, además, detiene la caída del cabello y mezclado con miel constituye una pomada para las pecas. Y lo mejor de todo, ¡el berro no engorda!
Sin embargo, se recomienda que aquellas personas que sufren de cálculos renales, arenilla, hipertensión, gastritis o hipotiroidismo eviten el consumo excesivo de berro.
Más allá de esto, el berro es excelente para la salud.
¡Luchemos por un mundo con más berro!