Los trabajólicos tienen una adicción no saludable. Por lo general la adicción es al trabajo, la carrera o creen que son los únicos que pueden hacer algo bien, por tanto no distribuyen las responsabilidades.
Este tipo de personas pasan la mayor parte de su vida en el trabajo o lo llevan a casa, relevando sus vidas personales a un segundo plano, ya sea familia, pasatiempos o relajación.
Es muy importante determinar si eres o no trabajólica ya que puede afectar tu equilibrio mental, físico, espiritual o emocional.
Por eso, hoy te enumeramos algunas de las características típicas de un trabajólico.
Primero que nada, es importante no confundir a una persona responsable y trabajadora con alguien trabajólico. Estos últimos son capaces de cancelar reuniones familiares por asuntos de trabajo y nunca se despegan del teléfono celular o notebook.
Los trabajólicos trabajan los días festivos, fines de semana e inclusive en vacaciones. Durante el día no pueden dejar de pensar en sus responsabilidades y sufren de trastornos de sueño.
Jaquecas, gastritis, cansancio crónico y stress son parte de su vida, mantienen conversaciones de trabajo todo el día y normalmente se saltean comidas para poder cumplir con tareas pendientes o adelantar trabajo.
Quienes tienen esta condición no disfrutan de tiempo libre, pues suelen ignorar sus propios gustos no aceptando o reconociendo que sufren de un problema.
Para descubrir si eres trabajólica hazte preguntas como las siguientes:
– ¿Estoy contenta con mi vida en general?
– ¿Me satisface mi puesto de trabajo?
– ¿Mi trabajo es lo que siempre soñé?
– ¿Mi familia me reclama más tiempo?
– ¿Tengo amigos?
Si respondes a la mayoría de estas preguntas negativamente entonces puede que tengas un problema.
Te recomendames que comiences a apartar tiempo para adentrarte en actividades que disfrutes y equilibres tu vida personal con la laboral.