En varias ocasiones hemos mencionado que dos elementos fundamentales para mantener una piel saludable son la limpieza e hidratación de la misma. Este último punto involucra el uso de cremas tanto por la mañana como por la noche. Aunque, ¿cuán asiduas debemos ser? ¡Hoy respondemos a esta pregunta!
Es importante tener en cuenta que las cremas de noche son la media naranja de las cremas de día, ambas se complementan y nos permiten lograr una reparación más profunda de la piel. Además, es importante tener en cuenta que la piel se regenera por la noche, por lo que la crema tiene una función fundamental durante este tiempo.
Por otro lado, cada tipo de piel es diferente, lo que conviene hacer es tras el desmaquillado o la limpieza nocturna, esperar alrededor de diez minutos para que se reestablezca el pH de la epidermis y ahí analizar cómo se encuentra la piel. Si la misma está muy tirante, entonces necesita hidratación extra.
Además, podemos analizar la piel a la mañana siguiente, observar si esta brillosa o sea. Un excelente truco para determinarlo es tomar un pellizco grande de piel de las mejillas entre dos dedos y observar si se marcan arrugas muy finas, si es así entonces esto es un síntoma de deshidratación.
Estos eran los consejos que teníamos para darte hoy, ¡esperamos la información te sea muy útil!