El amor, ¿una enfermedad?

Por metafórico que suene el título del artículo, esto es realmente así y está comprobado por estudios científicos.

La típica frase que se dice cuando alguien se enamorado: «perdió la cabeza», no está muy alejada de la realidad. El enamoramiento hace que liberemos distintas sustancias como: testosterona, estrógenos, feniletilamina, dopamina y otras sustancias hormonales y neurotrasmisoras que se liberan en nuestra sangre y recorren desenfrenadamente todo nuestro organismo.

Nuestro corazón se acelera, pensamos de manera obsesiva y recurrente en al persona querida sin poder concentrarnos en otra cosa. Según investigaciones hechas por las Universidades de California y de Nueva York (EE.UU.) el estado en el que nos sumimos puede compararse con algunas dolencias o inclusive con adicciones a ciertas drogas.

Además, se ha descubierto que las personas enamoradas tienen los niveles de serotina (sustancia del sistema nervioso) similares a los de las personas con trastornos obsesivos-compulsivos o a las que padecen depresión.

Estos son solo algunos de los muchos estudios que se han hecho sobre estos temas, todos desembocando en los mismos resultados, el amor es como una droga, y no solo metaforicamente, sino que realmente hace que nuestro cuerpo reaccione de forma similar a cuando se consumen drogas como la cocaína.

Y tú, ¿eres adicto al amor?

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