En la nota anterior estuvimos viendo cómo preparar algunas mascarillas especiales para la piel sensible, vimos una de avena y otra de zanahoria, ambas sumamente recomendables para la protección de este tipo de piel, ahora queremos enseñarte algunas mascarillas más. Son muy fáciles de realizar y muy efectivas, te animamos a intentarlas, ¡no te arrepentirás!
Vamos a comenzar con una mascarilla de almendras y huevo, para esto necesitamos ⅘ de almendras y un huevo. Toma primero las almendras; tienes que molerlas hasta formar una pasta. Luego añade el huevo, dejando que forme una capa fina. Coloca la mezcla en el rostro dejando actuar por 20 minutos y luego enjuaga. Lo mejor es que te coloques esta mascarilla antes de dormir y para obtener mejores resultados debes emplearla regularmente.
Por último, preparamos una mascarilla de cúrcuma y zumo de limón, en este caso necesitamos una cucharada de jugo de limón, 3 cucharadas de leche y ¼ cucharadita o puñado de cúrcuma. Mezcla la leche y el jugo de limón en un recipiente. Añade la pizca de cúrcuma a la mezcla. Aplicamos en el rostro dejando que se seque naturalmente. Una vez seca, enjuaga con agua fría y obtendrás una piel radiante de manera natural. Estos eran los consejos que teníamos para compartir, esperamos que los mismos te sean de gran utilidad, ¡suerte!