En la nota anterior habíamos comenzado a hablar sobre las bases en polvo, estuvimos viendo que estas pueden sernos de gran utilidad a la hora de esconder imperfecciones. Aunque, este tipo de productos son buenos siempre y cuando sepamos cómo utilizarlos correctamente, hoy hablamos sobre esto, te damos consejos para que puedas sacarles el máximo provecho, ¡presta mucha atención!
Primero que nada, debes tener el rostro limpio e hidratado, eso te ayudará a que el maquillaje se vea bien y dure más tiempo. A continuación, moja con un poco de agua una esponja de látex y aplica la base en polvo con movimientos circulares suaves, dando golpecitos en las zonas en las que deseas mayor cobertura.
En caso de que la base sea muy ligera puedes aplicarla en seco con un pincel para polvos; solo toma un poco de producto y colocalo con movimientos circulares. Algo que destacamos es que este tipo de bases no se recomienda para pieles grasas, pues no ayudan a absorber el exceso de sebo y al final se debe utilizar aparte un polvo suelto. Además, su capacidad cubritiva si bien mejora el tono de la piel no tapa las manchas.
Esto era lo que teníamos para compartir hoy, esperamos que esta información te sea de gran utilidad, ¡suerte!