¿Están tus oídos en perfectas condiciones?. La contaminación acústica de las ciudades o de los lugares de ocio como discotecas y salas de conciertos, el uso cada vez más intensivo de auriculares mientras corremos, nos movemos o trabajamos… son factores que acusan nuestros oídos porque ofrecen un nivel de decibelios por encima de lo recomendable.
Por eso es importante examinar nuestra capacidad auditiva de forma regular, para asegurarnos de que escuchamos como debemos. Dicen los otorrinos que una revisión al año es deseable, especialmente si hemos cumplido ya los 50, aunque no pensemos que podamos tener ningún problema.
Se trata de interiorizar esta costumbre igual que nos hemos acostumbrado (o deberíamos) a visitar regularmente al oftalmólogo o al dentista para sendas revisiones y comprobar que está todo en orden.Y es que pese a que las pérdidas auditivas sólo son superadas en número de afectados por la artrosis o la hipertensión, la mitad de los españoles asegura que nunca ha revisado sus oídos.
Preguntando a los expertos de los centros auditivos GAES (la multinacional líder en temas de corrección auditiva), nos cuentan en qué consiste una revisión auditiva.
Se trata de una prueba que dura unos minutos, y es totalmente indolora. Se revisa el oído en busca de tapones de cera y otros problemas como perforaciones o supuraciones anómalas.Luego, en una cabina insonorizada, se realizan diversas pruebas de audición. ¿Podremos distinguir bien los distintos sonidos de una misma palabra? ¿Hasta qué nivel de volumen recibimos sin dejar de oir? Incluso se realiza una medición tonal a través de nuestros huesos, para comprobar el nivel del oído interno.
Curioso, ¿no? No dejéis la salud de vuestros oídos de lado, que aún nos quedan muchas cosas agardables que escuchar durante nuestra vida. Las revisiones en GAES son gratuitas, así que no hay excusa para no cuidarnos.
Más información | www.gaes.es