Hoy queremos hablar sobre una herramienta de maquillaje muy empleada, se trata del corrector de ojeras, el mismo es muy útil para ayudarnos a esconder todo tipo de irregularidades en la piel. Hoy vamos a enseñarte a utilizarlo en verano, de forma que puedas sacarle el máximo provecho a todas sus funcionalidades, ¡presta mucha atención!
Las ojeras son un problema común del verano, ya que nos animamos un poco más a trasnochar y como consecuencia al otro día presentamos estas señales de cansancio. Si bien la coloración oscura de las ojeras tiene un componente genético, se hacen más visibles con el cansancio y con la edad. Afortunadamente los correctores nos rescatan de estas situaciones, ayudándonos a disimular y ocultar las señales de cansancio, aunque muchas veces cometemos errores que hacen que su efecto disminuya.
Por eso, es importante que aprendamos a utilizar este producto, una de las cosas que debemos entender es que la base y el corrector son productos diferentes, y el uso de uno anula la utilización del otro, por tanto, es importante escoger un producto específico para la zona del contorno de los ojos. En cuanto a las tonalidades, recuerda elegir el mismo tono que tu piel, no más claro, ya que se notará demasiado.
Por último, en relación a la aplicación, lo recomendable es que utilices correctores que sean ligeros, para que el producto no se acumule en las líneas de expresión haciendo que estas resalten. Estos eran algunos de los consejos que teníamos para compartir hoy, esperamos que los mismos te sean de gran utilidad y puedas lograr grandes resultados, ¡suerte!