Continuamos hablando de pies, estuvimos viendo que estos suelen descuidarse muchísimo durante el invierno, ya vimos cómo crear una mascarilla especial para lograr pies sumamente suaves. Ahora queremos continuar dando más consejos, aunque en este caso nos centramos en otro aspecto también sumamente importante, se trata de la hidratación. Si nos olvidamos de este paso importante nuestros pies se agrietaran con facilidad, además de tener un aspecto seco y descuidado. Por eso, te enseñamos otra mascarilla sumamente útil, ¡presta mucha atención!
Para comenzar, coge un recipiente y llénalo de agua tibia. Lo que vamos a hacer es introducir nuestros pies allí por lo menos 20 minutos. En este tiempo relájate y disfruta de tener tus pies en agua tibia y en remojo. Cuando hayan pasado los 20 minutos, verás cómo tu piel estará más suave, y entonces podrás quitar los pies del agua.
Una vez que los hayas quitado del agua, es importante que los seques muy bien frotándolos con suavidad, aplicamos una lima especial para pies o con una piedra pómez hasta que toda la piel muerta que tengas se haya eliminado por completo o al menos la mayoría. Una vez que hayas terminado es importante que limpies bien la lima, de forma que en el futuro la puedas utilizar y evites problemas de infecciones a causa de la suciedad.